Se centra en tres ámbitos:
– Aplicación colectiva de pruebas psicopedagógicas que evalúan, en distintos momentos evolutivos, el desarrollo de las aptitudes escolares, la adaptación y a integración social ya que influyen decisivamente en la etapa escolar. Las pruebas se enmarcan en nuestro Proyecto Educativo ALMA 10, ya que el perfil de alumno marista se va formando durante toda su vida escolar, desde los tres años hasta que terminan en 2º de bachillerato.
– Atención a las familias, dando respuesta a la demanda relacionada con temas educativos en el entorno familiar, así como, sesiones de escuela de padres, en las que se abordan temas que afectan a la vida cotidiana familiar, trabajándolos de forma práctica.
– Programas preventivos que refuerzan aspectos tan importantes para el desarrollo como el lenguaje, las emociones, la atención o las capacidades básicas.
